Juan Manuel Miñarro López, restaurador de Patrimonio Imaginero Andaluz a través del Taller del Museo Arqueológico de Sevilla, y Doctor en Bellas Artes en la Universidad de Sevilla, nació en Sevilla el 29 de enero de 1954. Se formó académicamente en la Escuela Superior de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría (Sevilla), contando entre sus profesores con el maestro desaparecido Juan Abascal. Desde 1976 compartió los estudios de Bellas Artes con el aprendizaje en el taller de Francisco Buiza Fernández. Es en 1984 cuando se licenció en Bellas Artes, culminando en 1987 con su tesis Doctoral “Estudio de anatomía artística para la iconografía del Crucificado en la Escultura”. En 1988, por concurso oposición, se convirtió en profesor de la Facultad de Bellas Artes de Sevilla, en el área de Escultura, siendo actualmente Catedrático de Escultura y Director de su Departamento universitario.
Su taller lo tiene en la histórica calle Viriato, 20, junto al que fuera Hospital de los Viejos. Su exposición itinerante llamada “El Hombre de la Sídone” le ha convertido en uno de los escultores imagineros más comprometidos con los estudios sobre la Sábana Santa y la anatomía de Jesucristo, que ha ido plasmando sobre todo en sus últimas realizaciones artísticas, caso del Nazareno para la Hermandad del Cerro, bendecido en la Cuaresma de 2004.Entre sus ya numerosos discípulos, podemos reseñar los nombres de los jóvenes escultores y pintores Ricardo Suárez, Fernando Aguado, Manuel Mazueco o José María Leal Bernáldez. Entre sus obras destacan la Dolorosa del Amor de Sevilla, las figuras de los soldados romanos, sayón y San Juan Evangelista del misterio del Cerro del Águila de Sevilla, el Cristo de la Redención de Málaga y el Santísimo Cristo del Calvario de Málaga.
Ha restaurado, entre otros, a los Titulares de la Hermandad de la Paz, a la Imagen de la Virgen del Rocío de la Hermandad de Sevilla, al Cristo de la Salvación de la Hermandad de la Soledad de San Buenaventura, a María Santísima de la O y la peana de Nuestro Padre Jesús Nazareno de la Hermandad de la O de Sevilla, a Nuestro Padre Jesús de Azotes y Columna de las Reales Cofradías Fusionadas de Málaga. Junto a Antonio García Ramos ha restaurado al Cristo del Desamparo y Abandono de la Hermandad del Cerro del Águila de Sevilla. En Ciudad Real ha restaurado también al Cristo de la Piedad. Como restaurador de tallas tiene una capacidad destacable para equilibrar el sentido científico y técnico con el artístico y espiritual.